Ventajas de las cubiertas vegetales




Mejora el clima urbano; Reducción del calentamiento urbano.

Reducción de la contaminación: Funcionan como un filtro ambiental.

Incrementa la retención de agua: Son capaces de retener hasta un 80% de la precipitación. Los sistemas de desagüe funcionan mejor, el agua fluye de forma más coherente.

Mejora la protección contra el ruido. Los cubiertas vegetales son excelentes atenuadores de ruido, especialmente a bajas frecuencias. Un techo extensivo puede llegar a reducir hasta 40 dB, mientras que un intensivo puede llegar a atenuar hasta 50 dB.

Ahorro de energía. Se consigue un aislamiento térmico eficiente.
Prolongación de la vida útil de la impermeabilización al estar protegida de temperaturas exteriores.

Proporciona nuevas zonas verdes en la ciudad que necesita de pulmones verdes para mejorar la calidad del aire.

Mejora de la visualización y espacios de ocio de la ciudad.

La vegetación puede cumplir varios funciones en la cubierta vegetal; Sombra, protección viento, resistencia fuego, biodiversidad, sombra, transpiración…etc.


Beneficios de las cubiertas verdes

1.Reducción del Efecto Isla de Calor Urbana

El Efecto Isla de Calor Urbana (ICU) es el incremento de la temperatura ambiente promedio en zonas urbanas. Esto se produce por el reemplazar la vegetación natural por pavimentos, edificaciones y otras estructuras destinadas a dar un hábitat a la población.

El impacto de la ICU tiene efectos negativos en tres aspectos principales:
-La salud de las personas: se observa que los aumentos de temperatura generan riesgos respiratorios y cardíacos.

-Medio ambiente: las elevadas temperaturas asociadas a la ICU aceleran reacciones químicas como aquellas relacionadas a los óxidos de nitrógeno (NOX), compuestos orgánicos volátiles y otras emisiones producto de procesos industriales.

-Consumo energético: el efecto de temperatura urbana hace que tengamos que desperdiciar más energía debido al aumento de temperatura.
Las cubiertas ajardinadas que estén expuestas directamente al sol, nos ayudan a evitar la ICU debido a que posee estos beneficios:

- Para la salud y el medio ambiente: las cubiertas ajardinadas mejoran los procesos naturales de enfriamiento ambiental, como la fotosíntesis y evapotranspiración. Para efectos de esta sección, la fotosíntesis absorbe energía que en el caso de no haber vegetación se transformaría en calor ambiente y la evapotranspiración mantiene los equilibrios naturales de humedad ambiente.

- Consumo energético: las cubiertas ajardinadas es una de las soluciones de mayor impacto para el consumo energético hasta la fecha. El estudio Mitigating the Urban Island with Green Roof Infrastructure, realizado por en Canadá indica que para la ciudad de Toronto, la demanda de energía asociada al uso de sistemas de ventilación, enfriamiento, aire acondicionado o climatización, es de 600 MW por cada 1º C de aumento de temperatura, lo que es equivalente al 3,8% de la demanda residencial.

Como conclusión de lo indicado, se aprecia que el uso de cubiertas vegetales se enfoca en disminuir efectivamente la demanda de energía causada por el efecto Isla de Calor Urbana.


2. Mejora de la calidad del aire y reduce la contaminación

A nivel global, se ha estimado que la contaminación mata a unas 800.000 personas al año (Kenworthy 2002), debido a la alta polución con presencia de dióxido de carbono, óxido de nitrógeno, monóxido de carbono y monóxido de azufre que tienen una relación directa con enfermedades respiratorias y episodios de asma en niños y adultos mayores.

Durante los próximos 30 años se observa que los problemas de contaminación del aire en las ciudades serán parte importante de la agenda pública, concitando el desarrollo de acciones tanto en el ámbito privado como gubernamental.
Este problema va en crecimiento, debido a las altas temperaturas, sumados al aumento del parque motor, emisiones de gases industriales y otras fuentes de contaminación incrementan en forma permanente la cantidad de contaminantes y material particulado.

Es de gran importancia que las ciudades se vuelvan cada vez más sostenibles para luchar contra la contaminación, una buena forma de comenzar a serlo es añadiendo cubiertas vegetales, y si no hay espacio suficiente, siempre queda colocar la cubierta de una forma menos convencional, en muros, en azotes, en fachadas… existen impresionantes ejemplos de jardines verticales en edificios, que aprovechan zonas poco convencionales para instalar fachadas verdes y ayudan a crear ciuades más sostenibles.

Una cubierta vegetal, es ideal para solucionar este problema, pues reduce la materia contaminante presente en el aire de las ciudades y reduce el impacto contaminante en la salud de las personas. Esto se debe a que la cubierta vegetal tiene entre sus beneficios, el de reducir la temperatura, captura dióxido de carbono y otros contaminantes presentes actualmente en un aire contaminado.

Analizando estudios realizados (Josh Kidd, 2005) se puede extrapolar que un metro cuadrado de vegetación, pasto o maleza, elimina hasta dos kg de material particulado, el que queda atrapado en su follaje.


3. Mejora de la gestión de aguas lluvia

La incapacidad de drenar de manera adecuada el agua procedente de la lluvia es uno de los principales problemas a los que se enfrentan hoy en día las ciudades. El origen de este problema está ligado muchas veces a la falta de previsión en la planificación de una red de drenaje. Si la red de drenaje no ha sido calculada teniendo en cuenta los caudales reales que el aumento de urbanización ha provocado, la incapacidad de la misma para absorber esos caudales provocará el desbordamiento de la red en zonas situadas aguas abajo, con el consiguiente perjuicio económico y social que esto supone.

Una posible solución a este problema consiste en destinar un espacio considerable en las ciudades, para retener una cierta cantidad de lluvia. Pero esto provocará mucho coste económico y no permitirá que ese espacio se pueda utilizar para otro menester.

La cubierta vegetal es la mejor solución a este problema, puede reducir hasta el 60% de la escorrentía y hasta un 85% de la evacuación de aguas durante las dos primeras horas de una lluvia intensa.

El uso de cubiertas vegetales reduce el caudal de escorrentía urbana, aportando efectivamente a solucionar la problemática urbana de inundaciones o anegamientos de poblaciones.


4. Mayor eficiencia energética

La cubiertas vegetales son los elementos donde se producen las mayores pérdidas de calor en invierno y, como superficie expuesta a la radiación solar en centros urbanos, las mayores ganancias de calor en verano.

El National Research Council de Canadá publicó en 2003 los resultados de una investigación realizada en la ciudad de Ottawa, que presenta resultados en los cuales se observa que una cubierta vegetal reduce la transmisión de calor de ganancia de la edificación (período de verano) en un 95% respecto de una techumbre normal y que dicha reducción llega a un 26% en casos de pérdidas de calor (período de invierno).

Es interesante destacar que la reducción en el gasto de energía eléctrica, por menor uso de equipos de aire acondicionado, fue equivalente a un 75%.
El uso de cubiertas vegetales, desde la perspectiva privada reduce sustancialmente el costo energético usado para climatizar los espacios interiores de las edificaciones.

Por este motivo, una fachada verde en un edificio tiene múltiples beneficios, de los que podríamos destacar este mismo, la reducción del gasto energético, además de ser un buen aislante térmico y acústico, ¿Quien no añadiría una cubierta verde a su fachada teniendo en cuenta todas sus ventajas?.

5. Incremento de la durabilidad de la membrana impermeabilizante

Los tejados tienen una vida útil de 15 años aproximadamente. Uno de los motivos por los que sucede esto, se debe a las membranas impermeabilizantes.
Cuando las membranas están expuestas a condiciones muy severas de variaciones de temperatura cada día, tienen una mayor velocidad de degradación. Por ejemplo, en una techumbre tradicional, en un período de 24 horas, las membranas impermeabilizantes pueden estar expuestas a variaciones de temperaturas que alcanzan los 45 Cº, mientras que aquellas que son parte de una cubierta vegetal está expuestas a variaciones del orden de 6 Cº.

El uso de cubiertas vegetales permite reducir los costos de mantenimiento de las techumbres al incrementar la vida útil de las membranas impermeabilizantes.

En las ciudades de Estados Unidos, las cubiertas vegetales tienen, en promedio, una vida útil de 25 años, lo que implica una reducción de costos por reparaciones y mantenimientos de techumbres en un 40%.


6. Reducción de ruidos

Las cubiertas vegetales son excelentes atenuadores de ruido, especialmente a bajas frecuencias. Un techo extensivo puede llegar a reducir hasta 40 dB, mientras que un intensivo puede llegar a atenuar hasta 50 dB.

Esta característica las hace muy convenientes para lugares de la ciudad en los que haya mucho ruido: aeropuertos, conciertos, discotecas, etc

7. Apoyo en fortalecimiento de imagen y comercialización.

Las cubiertas vegetales no sólo lograr disminuir la demanda energética, mantención de las edificaciones y mejorar las condiciones de vida en las ciudades, sino que también aportan en la comercialización de los edificios y en la imagen corporativa de los inversores.
Las cubiertas vegetales permiten generar una sensación de salud y de espacios atractivos para trabajar en los grandes centros urbanos. Múltiples usos se pueden definir en los proyectos, desde una simple cubierta verde hasta zonas de descanso para las personas.


Cubiertas ajardinadas para conseguir ciudades más sostenibles

Generalmente en los barrios céntricos de las grandes ciudades 1/3 de la superficie está edificada, 1/3 corresponde a superficies pavimentadas de calles y plazas, y tan sólo queda 1/3 de superficies verdes. Por este motivo, si por cada cinco techos hubiera una cubierta vegetal, la superficie de hojas en esa ciudad se duplicaría.

Una cubierta vegetal sin podar tiene de promedio de 5 a 10 veces más de superficie de hojas que la misma área en un parque abierto, por este motivo sería suficiente con instalar cubiertas verde entre un 10 y un 20% de todas las superficies techadas de una ciudad.